«Tengo que ponerme con el curso que compré y no encuentro el momento.»
«Me gustaría tener más fuerza de voluntad para ir al gimnasio todos los días.»
«Quiero tener más fuerza de voluntad para comer mejor.»
«Necesito más fuerza de voluntad para sacarme de una vez por todas el certificado de inglés.»
«Ojalá tuviera más fuerza de voluntad para acabar ese proyecto.»
«Estoy cansado de sentir que unos días soy super productivo y otros no consigo encontrar la motivación.»
¿Te sientes identificado con alguna de estas frases?
No eres el único. Nosotros también nos hemos sentido así muchas veces.
¿No crees que hoy en día hemos perdido un poco la capacidad de esfuerzo y sacrificio?
Nos acostumbramos a lo cómodo y luego ni si quiera somos capaces de mantener nuestros propios propósitos y luchar por nuestros sueños.
¿Por qué nos pasa esto?
Por la falta de fuerza de voluntad, autodisciplina, autocontrol.
Y por desgracia está bastante más extendido de lo que te imaginas.
Pero ¿qué es exactamente la Fuerza de Voluntad?
A nosotros nos gusta definir la fuerza de voluntad como:
La capacidad de hacer lo que sabes que es lo correcto, por encima de las dificultades o tu estado de ánimo.
[Tweet «Fuerza de voluntad es la capacidad de hacer lo correcto en cada momento, a pesar de las dificultades #emprender»]
O lo que es lo mismo, ser capaz de sacrificar parte de tu presente por un futuro mejor a largo plazo.
Ponerte a currar.
Ni más ni menos.
Aunque te apetezca más irte a tomar una cerveza, quedarte en el sofa viendo una serie o simplemente no hacer nada.
Mucha gente piensa que el nivel de fuerza de voluntad va en el carácter. Te aseguro que no es así.
La fuerza de voluntad se puede entrenar. Y es clave si quieres de verdad tener éxito en la vida.
Hoy vamos a hablar del primer paso que hay que dar para empezar a cambiar: Identificar y admitir el problema.
A ver si te ves identificado con alguna de estas situaciones:
1. No acabas los proyectos que empiezas
No es nada raro que empieces un proyecto con mucho entusiasmo y que cuando estés a tope con él vayas perdiendo esas ganas que tenías al principio.
Incluso hay veces que lo dejas para más adelante o directamente lo abandonas porque dices que “no tienes tiempo”.
Pero no te engañes, no es falta de tiempo. Seguramente no es tu prioridad o no tienes suficiente fuerza de voluntad. No tienes un compromiso real.
Otras veces te pasa que abandonas al primer obstáculo que encuentras.
Y así tienes infinidad de ideas y proyectos a medias que te pesan cada día.
2. Te cuesta mucho crear nuevos hábitos
Sabes que los hábitos son importantes para el éxito.
Pero aunque lo normal es que empieces muy motivado, la mayoría de las veces conforme pasan los días empiezas a fallar y acabas por tirar la toalla.
Por ejemplo, te propones hacer ejercicio de forma regular porque sabes que es importante estar en forma. Empiezas muy fuerte la primera semana, pero luego… que si tengo mucho trabajo, que si estoy cansado, que si el lunes ya empiezo en serio…
Otro ejemplo son todos esos nuevos hábitos que te propones en año nuevo y luego no consigues mantener ni 3 meses.
Y es que todo el mundo puede proponerse nuevos hábitos pero son pocos los que de verdad son capaces de mantenerlos en el tiempo.
Todo esto va haciendo que te sientes mal contigo mismo por no ser capaz de cumplir con lo que tú mismo te comprometes.
3. Antepones el placer inmediato a la responsabilidad
Sabes perfectamente lo bien que te sentirías si acabaras por fin ese proyecto, si pusieras en marcha ese negocio, si aprobarás ese examen de inglés.
Pero… eres débil. Y lo sabes.
Y aunque sabes que no hay resultado sin esfuerzo, se está muy bien en el sofá, o en el solecito, o tomando unas cañas.
Te vence la pereza y acabas yendo a lo fácil.
Así le estás dejando el marrón a tu yo futuro, que tendrá que volver a enfrentarse al problema y al final acabará dándose por vencido y pensando que no es capaz de lograr lo que se propone.
Y con razón.
4. Sueles procrastinar las tareas importantes
Si, estás muy ocupado, como todos. Pero ¿por qué siempre, de todas las tareas que tienes, acabas poniéndote a hacer la tarea más sencilla en vez de la que deberías?
No lo puedes evitar, tu mente es creatividad total cuando se trata de ponerte excusas para procrastinar:
«No hay tanta prisa, lo puedo hacer mañana»
«No se como seguir, necesito más información»
«No se por donde empezar»
«Voy a mirar Facebook y Twitter a ver si me inspiro :D»
Y es que hay tareas que cuesta un mundo ponerse con ellas. Pero suelen ser las más importantes y las que de verdad te hacen avanzar.
Hay muchos motivos que te pueden llevar a procrastinar, pero la realidad es que tú sabes qué es lo que deberías estar haciendo, aunque no hagas más que poner excusas para retrasarlo 😉
¿Y ahora qué?
Ahora te toca tomar acción para mejorar esa fuerza de voluntad y así poder conseguir lo que te propongas.
Para eso tenemos algo que te puede interesar: el curso en el que hemos reunido todo nuestro conocimiento sobre cómo hackear tu mente para tener niveles de energía y fuerza de voluntad fuera de lo normal.
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Aquí te dejamos más info sobre la Fuerza de Voluntad…
- Todo sobre la Fuerza de Voluntad
- Por qué no sirve de nada hacerse Propósitos de Año Nuevo
- Envidia Emprendedora y por qué no tendrás éxito sin Fuerza de Voluntad
Bueno, esto han sido solo unos cuantos síntomas y problemas que puedes estar sufriendo día a día por culpa de no tener fuerza de voluntad. Te recomiendo que empieces a ponerte las pilas en este aspecto porque es una de las claves del éxito en cualquier faceta de la vida.
Conseguir dominar tus pensamientos, tu energía y tener autocontrol para hacer lo que tienes que hacer, marcará la diferencia.
¿Qué opinas? ¿Crees que en general nos cuesta tener autodisciplina? ¿Sientes que en determinados momentos necesitas más fuerza de voluntad? ¿Cuanto de importante crees que es para conseguir tus objetivos?
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No podría estar más de acuerdo, a mi es algo que me ha costado horrores….soy un culo inquieto y siempre que estaba a punto de cerrar un proyecto ya estaba para empezar otro y eso no me funcionaba demasiado bien….
Además, el punto 4 es uno por los que al final se te acumulan tantas tareas importantes y te pasas una época más que agobiado cuando facilmente podrías repartir las tareas a lo largo del tiempo y estar más relajado.
Muy bueno chicos 🙂
Hola Alex!
Efectivamente, la motivación para hacer cosas es importante, pero la disciplina y perseverancia lo es aun más porque sino no conseguimos acabar nada…
Tu creo que lo tienes ya dominado! jeje
Un abrazo!
Me identifico con cada una de las conductas que se mencionan. Y me urge hacer algo por mi
¡Hola, pareja!
Bienvenidos de las vacaciones, por aquí también volvemos con las pilas cargadas e intentando tener presentes siempre estos cuatro puntos. Muy útil este artículo para no olvidarnos de qué es lo que nos mueve a hacer las cosas con constancia.
Dentro de poco escribiré un artículo en mi blog de Prismalize (prismalize.wordpress.com) sobre el efecto que produce el ejercicio físico (en mi caso, correr) en la fuerza de voluntad y la constancia, porque desde hace tiempo veo que hay una relación directa entre ambas cosas y será interesante poner esas impresiones sobre papel.
De nuevo, bienvenidos y espero vuestros artículos con las ganas de siempre.
Carlos
Hola Carlos!!
Cuanto tiempo! Me alegra verte por aquí 🙂
La relación entre el ejercicio físico y fuerza de voluntad va más allá de una simple apreciación, ¡es ciencia! Así que vas por buen camino 😉
Un abrazo!
Hola chicos! Qué tal la vuelta de las vacaciones? Aunque cuando trabajas en lo que te gusta nunca estás del todo trabajando ni del todo desconectado, verdad? 😉
Habéis hecho una clara descripción de lo que es la pereza, desidia, resistencia.
Hace un par de semanas escribí sobre este mismo tema aportando un par de soluciones que a mí me han funcionado y coincido con vuestro diagnóstico.
Lo curioso es que lo identificamos con facilidad, pero ponerle solución ya es más complicado. Sabemos que estamos haciendo el vago, lo identificamos y asumimos que nos dejamos llevar por la opción fácil. Hasta ahí bien.
La pregunta que viene a continuación es: ¿cómo avanzar y salir de esa situación de bloqueo y desgana?
Yo tengo una respuesta que me ha funcionado siempre: ayuda externa (a.k.a. alguien dándote con el palo).
Si tú sólo no eres capaz de sacar esa motivación, asúmelo y pide ayuda.
Es en este momento donde entran en juego los coach, mentores, entrenadores personales, profesores particulares, retos en grupos de redes sociales, etc.
Gracias a este apoyo externo vas a vencer el bloqueo por dos motivos:
1.- Tienes que pagar por sus servicios, ergo te duele el bolsillo, ergo le pones más atención.
2.- No quieres decepcionar ni pasar la vergüenza de asumir tu fracaso frente a otra persona.
Existen muchas formas de motivarse a uno mismo y vencer la pereza por propia voluntad.
Pero si todo eso falla, pedir ayuda externa resulta muy efectivo.
Un saludo pareja 😉
Hola Rener!!
Las vacaciones muy bien, pero efectivamente cuando trabajas en lo que te gusta nunca se llega a desconectar del todo jaja
Totalmente de acuerdo, la ayuda externa es una de las técnicas para ayudarte a comprometerte con tus objetivos y no flaquear.
Pero hay muchas más de las que hablaremos el viernes 😉
Un abrazo!
Necesito mejorar mi fue rza de voluntad, todo lo voy postergando y no logro terminar nada, tengo la mente dispersa y me cuesta concentrarme, es como si no tuviera motivación. Un saludo
¡Buenas!
Sin lugar a dudas habéis tocado el punto flaco de la mayoría de personas. Quién no tiene algo por empezar o algo por terminar para lo que “casualmente” no encuentra nunca el momento.
Somos especialistas en llevarnos al límite y es ahí, cuando ya no podemos más y cuando las consecuencias están siendo nefastas para nosotros y tocamos fondo cuando decimos “Hasta aquí”. Vamos, cuando entramos en modo supervivencia y tememos perder lo que tenemos (ya sea la salud o cualquier cosa material).
Personalmente procuro ser constante en lo que hago pero reconozco que hay alguna faceta en la que soy más flexible y que toca trabajarla.
Estaré atenta a vuestros consejos.
Gracias por compartir chicos. 🙂
Hola Mónica!
Pues sí, esa procrastinación o falta de disciplina es más común de lo que pensamos.
Y muchas veces nos conformamos porque creemos que no podemos mejorar, pero siempre se puede mejorar en todo 😉
Un abrazo!
El de la falta de voluntad es un tema muy actual. La cultura del «dejar para mañana» la tenemos muy instaurada en esta sociedad. Recurrimos a lo fácil, al placer inmediato. La verdad es que es difícil «hacer lo que debemos hacer» en una época como la actual, donde las nuevas tecnologías se han convertido en los principales «ladrones de tiempo», empezando por el teléfono móvil.
Creo que una de las mejores soluciones es retarse a uno mismo, pero hacerlo en grupo. Me explico. Si consigues reunirte con un grupo de personas (aunque no sea muy amplio) que de verdad tienen inquietudes en la vida y su propósito es luchar por alcanzar sus sueños, la motivación se hace más fuerte. Cada uno asume las tareas a realizar para cumplir una serie de objetivos, y las expone al grupo. En cierta medida, esa verbalización pública de lo que uno se ha comprometido a hacer nos puede dar más fuerzas para hacerlo. Y no abandonar a la primera de cambio.
Un abrazo, y felicidades por el post.
Hola Ernesto!
Si, totalmente de acuerdo. Rodearse de un grupo de gente que te sirva de motivación y de apoyo es básico!
Es una forma de rendir cuentas a alguien y también de aprender de los demás por supuesto.
Buen aporte 😉
Un abrazo!
Excelente articulo Isa, muy alentador! 😀
Es imprescindible trazar una ruta de trabajo, diaria, normalmente la noche de antes, y cumplirla al día siguiente sin escusas. Otra opción es trazar un planning de trabajo con una serie de actividades a realizar a lo largo del día, eligiendo proyectos en cada una de las actividades a realizar. Por ejemplo, yo estudio cosas de universidad, estudio idiomas, me preparo con algún curso, y finalmente trabajo en mi proyecto web. Eso todos los días de la semana, con horarios diferentes según el día, pero haciendo siempre algo de cada actividad.
Me siento totalmente identificada con lo que hablan, de hecho me hace sentir culpable porque sé que soy yo misma saboteándome respecto a la persona que quiero ser y las cosas que quiero conseguir… de seguro les seguiré leyendo para ayudarme con sus consejo!
¡Hola Isa y Juanmi! La verdad es que con el punto con el que más me identifico es el primero.. Tengo muchas ideas en la cabeza -que además van cambiando y aumentando cada dos semanas o así..- y no he sabido priorizarlas hasta ahora, con lo cual llevo ya uno o dos proyectos en la cabeza desde hace un año, y no los he llevado a cabo. ¡Muy mal!
Pero lo que estoy haciendo ahora es una lista de las cosas que quiero hacer, y voy a elegir dos o tres para llevar a cabo este año, ¡ya está bien!
¡Muchas gracias por el post y por abrirnos los ojos!
Isabel
Hola Isa!
Cuán identificada me siento ! Nombraste cada una de las cosas por las que pasé. Pero sin duda la que más sufrí fue la primera.
Hoy puedo decir felizmente que, con un proyecto entre manos, estoy imponiendo de a poco buenos hábitos, y claro.. con mucha fuerza de voluntad.
Gracias por los aportes de Mas y Mejor! Estan siendo de gran utilidad 🙂
Abrazo!