24 Dueños de Negocios Rentables Responden: Qué te hubiera gustado saber cuando empezaste #SemanaProductividad

A tan sólo unos días de empezar la Semana de la Productividad, hoy os traemos un contenido que hemos preparado con mucho cariño.

Una pregunta directa: ¿qué te hubiera gustado saber gustado saber cuando empezaste?

Y 24 Emprendedores líderes en sus sectores nos cuentan todo, todo y todo lo que les hubiera gustado saber, hace unos cuantos años, cuando empezaron con sus negocios.

¡Os dejamos con ellos!

Antonio Leiva, @DevExperto

En mi caso, he pecado mucho de hacer cosas que me resultaban sencillas por mi perfil técnico, aún sabiendo que eso hacía que no dedicara ese tiempo a las tareas que realmente podían impulsar mi negocio.
Piensa en cada tarea que haces en tu día a día, y plantéate si podrías delegarla o automatizarla. Da igual que sepas o no hacerla, o que la vayas a hacer mejor. Lo que importa es si está aportando valor a tu negocio de una forma que solo tú puedes hacerlo.
Si alguien lo puede hacer por ti, o hay una herramienta que lo soluciona o automatiza, estás perdiendo tiempo que podrías dedicar a hacer crecer tu negocio.
Esto no quiere decir que tengas que hacerlo desde el principio. Hay veces que no se tiene esa capacidad de inversión, y está bien. Pero en cuanto que puedas hacerlo, adelante con ello.
A día de hoy siempre tengo en mente cuáles son las tareas en las que puedo aportar un valor único y diferencial, y me voy deshaciendo progresivamente de todas las demás.
Es cierto que delegar es una tarea complicada, y que por mucho que te cuente, seguramente necesitarás pasar por ese proceso para darte cuenta (lo sé porque a mí me ha ocurrido).
Pero puedes ir inicialmente soltando temas más recurrentes que cualquier persona puede hacer siguiendo una guía, para poco a poco empezar a liberarte de tareas un poco más complejas.
Lo ideal es que el negocio pueda funcionar sin ti, así que ponerse esa meta es la mejor de las formas de atreverse a ir dando pasos.
Normalmente, todas esas limitaciones son propias, y hay personas súper capaces de encargarse (con la debida formación) de llevar todos los aspectos administrativos de tu negocio sin necesidad de que estés ahí.
Recuerda: el objetivo es crear un negocio, no un auto-empleo.

Francisco Fortuño, @FFrancisCoach

Me hubiera gustado que alguien me dijera que disfrutara del proceso. En lugar de estar siempre pensando en la siguiente cifra, el siguiente seguidor, el lanzamiento de más dinero, disfrutar de todo. Ser emprendedor puede ser un camino de crecimiento personal y tiene muchas fases, así que aceptar cual es la situación en el presente, agradecer por estar ahí y caminar firmemente, con claridad y compromiso hacia los objetivos que te dibujes. Pero siempre desde la abundancia y la gratitud, y no desde la necesidad de hacer más y no sentirme suficiente.
Crecer de manera sostenible es para mí un innegociable. Disfrutar de cada paso de este impresionante proceso. Acompañarme de personas similares, tener mentores que me puedan guiar en un camino que si no se muestra muy confuso me hubiera ayudado mucho al principio.

Borja Gómez, @BorjaPrensa

Cuando empecé con mi negocio, me hubiera gustado saber cómo crear servicios y productos que fueran rentables para mí y me permitieran dedicar tiempo a hacer crecer el propio negocio. Y por supuesto, que respondieran a la necesidad de mis clientes. Como emprendedores, lo que vendemos en muchas ocasiones es nuestro tiempo de dedicación.
Al principio, creemos que ese tiempo es casi infinito. Que podemos estar echando horas y horas quitándosela al sueño, a los fines de semana y festivos, a nuestras familias y a nosotros mismos. Pero llega un momento en el que la maquinaria no puede dar más de sí; hemos estirado tanto la goma, que corre el riesgo de romperse.
Además, es muy habitual que llegados a ese punto, ni siquiera estemos cuidando el crecimiento del negocio. A mí me pasó que todo mi tiempo disponible, e incluso más, se lo dedicaba a los clientes. No hacía nada para hacer crecer mi marca, ni para atraer nuevos clientes. Dependía exclusivamente de los que ya tenía, ¿cómo salir de esa especie de rueda del hamster?
¿Cómo podía crear un servicio lo suficientemente valioso para los clientes, que estuvieran dispuestos a pagar un alto precio por él? ¿Y que además estuviera perfectamente procedimentado, para poder delegarlo y que yo me pudiera encargar de supervisarlo sin tener que ejecutarlo?
Es más… ¿Cómo ‘infoproductizar’ este servicio, para hacerlo más accesible a emprendedores que no pueden pagar un ‘llave en mano’, pero sí un ‘Do It Yourself’? Esto me permitiría escalar más el negocio y dedicar mi tiempo a hacerlo crecer. En aquel momento, crear un infoproducto y venderlo era casi ciencia-ficción… O así lo veía yo.
Pero, ¿por dónde empezar con todo esto? Eso es lo que me hubiera gustado saber cuando lancé mi negocio: Cómo darle forma a esto, impactando directamente entre mi público objetivo.

Jordi Solé, @jordisolemercade

Cuando empecé a construir mi negocio digital cometí muchos errores que me hicieron perder muchos meses de trabajo en vano. Como muchos emprendedores, lo intenté por mi cuenta sin ayuda. Fracasé totalmente. Construí mi primera web yo mismo, a mí me parecía maravillosa pero mi primera mentora me hizo ver que era una web cero estratégica, sin apenas ningún Lead Magnet ni una propuesta de valor clara y definida. Lo primero que recomiendo a alguien que empieza es formarse con mentores que ya hayan conseguido resultados. Estos mentores también nos llevarán de la mano para definir nuestra propuesta de valor para el mercado basada en nuestras fortalezas profesionales.
También muchos emprendedores están fallando en no construir una lista de suscriptores desde el minuto cero. En los negocios digitales de venta del conocimiento es esencial construir una lista de leads o suscriptores, nutrirlos adecuadamente, aportarles valor para que la venta se haga con los ojos cerrados. No hay otro camino.
Otro aspecto esencial para emprender es trabajar la mentalidad, sin la mentalidad adecuada es imposible tener resultados y es donde la mayoría de proyectos emprendedores fallan. La gente desiste. Persistir e insistir es la clave. La mentalidad adecuada es el 90% del éxito de un negocio. En tercer lugar, formarme en productividad ha sido clave. Un antes y un después. Muchas veces confundimos estar ocupados en ser productivos. En mi caso los resultados no llegaban y es que trabajaba sin objetivos claros. Los números no salían y el problema era trabajar sin rumbo. Por último, rodearse de las personas adecuadas es importantísimo, el entorno empuja o nos hunde. Si somos la media de las 5 personas de las que nos rodeamos la clave está crear un entorno nuevo para emprender. La vida del emprendedor puede ser muy solitaria. Hay que salir de la cueva, hacer contactos profesionales, tener toda la relación que podamos con compañeros de profesión con quien compartimos los mismos objetivos e intereses y sobretodo, asistir a eventos y formarse de forma continuada. En mi caso invierto miles de euros anuales en formación y ha sido la clave de llevar mi negocio de un punto A (muchas dificultades iniciales) a un punto B (un negocio de seis cifras anuales este 2020).

Dani Aragón, @dani_aragon

Una de las cuestiones que me hizo perder tiempo y dinero en mis comienzos fue todo lo relacionado con los impuestos y burocracia del emprendedor. Es un territorio hostil para mí y el desconocimiento por aquel entonces hizo que tuviera problemas serios para llevar la gestión de mi empresa de manera óptima porque no se trata solo de que un gestor/a te lleve el asunto sino de entender porqué hay unos impuestos obligatorios, como mejorar el rendimiento de ingresos/gastos, etc…
Otro punto que me hubiera encantado dominar en mis comienzos fue todo lo relacionado con la productividad. Mi tiempo, al igual que el tuyo, es limitado y la gestión de múltiples tareas me llevó a perder el foco con problemas del día a día que en su mayoría no eran relevantes y desgastaban energía. Hoy tengo bien estructurada mis tareas según relevancia y la optimización del tiempo para no perder el foco en lo realmente interesante.
Por último, tardé en delegar aquellas tareas, como cuento más arriba, que me hacían perder el foco porque cuesta dar el paso y depositar la confianza en una persona externa. Si aciertas es gasolina para el crecimiento de la empresa porque pones tu energía en lo realmente relevante.
Todos los emprendedores, cuando arrancamos, lo hacemos con una base de conocimiento pero siempre queda parte que da lugar a la improvisación. Como bien me decía un mentor, hay que sudar más en el entrenamiento para sangrar menos en la guerra.

Jordi Ollé, @JordiOllé

Me hubiera encantado saber que crear un negocio lleva sí o sí un cambio personal muy enriquecedor siempre y cuando tu negocio salga de un impulso interior.
El crecimiento del negocio está íntimamente relacionado al crecimiento personal. Y cada uno conoce su propia definición de crecimiento del negocio: unos quieren facturar 1M€, otros quieres cambiar la vida a 1000 alumnos, otros quieren trabajar 20 horas a la semana para estar junto a su familia, otros quieres, simplemente, sentirse realizados con su día a día y tener unos ingresos cómodos…

Cada uno tiene su propia definición. Cada uno sabe dónde quiere llegar y en quién quiere convertirse.
Si no lo sabes, pregúntate cómo será tu negocio en 1 año, 5 años y 10 años
Y cómo quieres ser en 1 año, 5 años y 10 años.
Creo que es lo más importante en un negocio, quién eres y quién quieres llegar a ser, para que tu negocio vaya en la misma dirección.
Esto es lo que me hubiera encantado saber antes de empezar, mi negocio es un viaje personal – profesional conjunto que hace que sea más consciente de la vida que quiero vivir.
Eso me ayuda a no seguir los sueños de otros y diseñar mi propio camino 🙂

Javier Santos, @administracionvirtual

Pues la verdad es que hay varias cosas muy importantes que está bien saber cuando empiezas con tu negocio y que vas aprendiendo con el tiempo, ahora te pondré algunas cosas que a mí me hubiera gustado saber, pero también te diré una cosa, es cierto ese dicho de “nadie escarmienta en cabeza ajena”.
Tendrás que seguir tu propio camino, equivocarte, salir a flote. No importa cometer errores, lo importante es aprender de ellos, mejorar y seguir intentándolo.
Algunas de las cosas que te voy a comentar seguro que ya las has leído por ahí, pero créeme, al final, es muy posible que tú también caigas.
Ahora sí, te dejo con algunas cosas que me hubiera gustado saber desde el principio.
La organización lo es todo. Planifica y respeta los tiempos. No olvides que además de atender a tus clientes debes reservar tiempo para las tareas estratégicas de tu negocio y por supuesto, para tu vida fuera del negocio.
No tienes porqué hacerlo todo tú. Al principio pecamos mucho de esto, pensamos que nadie lo hará tan bien como nosotros o que solo nosotros conocemos nuestro negocio por dentro, pero te aseguro que cuando entiendes que puedes pedir ayuda y apoyarte en otras personas tu vida como emprendedor cambia radicalmente y dejas de sentirte esclavo de tu negocio.
Tú decides. No tienes porqué seguir el camino que otros te marquen. Si quieres crecer como negocio, crece, pero si quieres quedarte más pequeño también está bien. No tienes porqué montar un súper negocio que facture millones. Haz lo que tú quieras hacer.
La adaptación al cambio es fundamental. Seguro que ya sabes que el mundo gira a una velocidad de vértigo, y el mundo online más todavía. Si hay algo fundamental cuando empiezas un negocio online es saber adaptarte a los cambios, lo que ayer era 100% válido hoy ya no sirve. Lo que tu mente había planificado, al final vira hacia otro sitio distinto. Adáptate.
Con esto no quiero decir que tengas que estar dando bandazos de un sitio a otro como pollo sin cabeza, para nada (recuerda el primer punto). Pero si que tendrás que ser permeable a esos cambios, estar atento, identificar donde está ahora tu público y darle lo que quiere, no lo que tú creías que quiere.
Todo lo que te he comentado son cuestiones más relacionadas con la mentalidad, pero es que ahí está la base de todo.

Braulio Moreno, @theimagen

Me hubiese gustado saber muchas cosas, la verdad. Una de ellas es que esto de emprender es más difícil de lo que parece y que por ese motivo, es muy importante cuidarse y estar bien con uno mismo antes de crear cualquier cosa. La salud física y mental es la base de nuestro negocio, que nunca puedes descuidar esa base si realmente quieres crear algo a largo plazo.
Y después que para hacer crecer el edificio de tu negocio sobre esa base, más vale hacer las cosas bien, de una forma planificada, no hacer las cosas por hacerlas o porque las hagan otras personas. Todo lo que hagamos debería estar supeditado a nuestro propósito en la vida y no hay que correr, no hay prisa, se puede y se debe planificar. No llega más lejos el que va más rápido, si no el que sabe dónde va. Es mucho más importante encontrar el nicho adecuado, las personas a las que uno puede ayudar y si uno se dirige a ellas de forma genuina y honesta para ayudarles a superar algún obstáculo ya está. Tiene mucho ganado.
Por lo tanto, otro aprendizaje es que no debería haber acción, sin planificación 😉 Un plan que te lleve de los sueños a los hechos. Y que si lo sigues, te permita ir de los hechos a los sueños.
Y un último aprendizaje importante, que uno no puede ni debe ser el hombre orquesta. Que hay que rodearse de gente que nos ayude a seguir adelante y que son mucho mejores que nosotros en muchos aspectos. Cada uno deberíamos centrarnos sólo en lo que somos especialmente buenos.

Emilio Valcárcel, @emiliovalcarcel

Cuando decidí emprender venía de una larga carrera como alto directivo en una multinacional, y pensaba (inocente de mí) que muchas de las habilidades que había adquirido en ese tiempo me iban a servir también en mi propio proyecto.
Y es verdad que algunas de esas capacidades, como la experiencia dirigiendo equipos, o estar acostumbrado a tomar decisiones importantes, me han servido en esta nueva etapa.
Pero me hubiera gustado saber que hay otras muchas habilidades necesarias para emprender que solo vas aprendiendo cuando estás metido hasta el cuello en tu proyecto.
La capacidad de manejar la incertidumbre, de crear tu propia audiencia y comunicarte con ella, de organizar tu día cuando eres el único dueño de tu propio tiempo, de colaborar en red y crear sinergias con otros emprendedores como tú…, todo esto solo se aprende a medida que vas avanzando en tu proyecto.
A medida que tu negocio crece y te va a sometiendo a nuevos retos.
Cuando decidí emprender, también me hubiera gustado saber que iba a sentirme lleno como nunca, porque lo que hago tiene verdadero sentido para mí.
Me hubiera gustado saber la felicidad que iba a sentir cuando ayudo a una persona a dejar atrás sus barreras y a transformar su vida y su trabajo.
Me hubiera gustado saber que iba a encontrarme con gente maravillosa en el camino, gente creativa, que decide hacer realidad sus sueños y a veces también los de los demás.
Me hubiera gustado saber cuánta necesidad de ayuda tiene la gente ahí fuera, y que vender mis servicios y mis productos es la mejor manera que tengo de hacerles llegar esa ayuda y de dejar mi huella en el mundo.
Y me hubiera gustado saber que la sensación de responsabilidad y la de libertad pueden ir de la mano, cuando lo que haces tiene verdadero sentido para ti.
Estas son algunas de las cosas que me hubiera gustado saber antes de emprender mi negocio.
Porque, si las hubiera sabido, lo hubiera hecho mucho antes.

Antonio Portillo, @antonioportillosherpa

Realmente cuando empiezas en todo este mundo llegas con mucha energía e ilusión. Todo brilla, te deslumbra y sólo nos centramos en lo maravilloso que es todo… pero te cuentan la verdad a medias.
No es tan bueno todo como dicen… al principio. Nadie te habla de todo el esfuerzo que hay detrás de emprender por internet. Sobre todo de las consecuencias que eso conlleva, tanto contigo mismo, tu salud y tu vida con la pareja y familia.
La verdad es que puedes perder cosas muy importantes en la vida, o incluso estar en la cuerda floja como yo lo he estado en algún ámbito de mi vida.
Lo que me hubiera gustado es tener las ideas más claras en el verdadero objetivo al emprender. Alguien que me hubiera quitado todas las ideas de lo que no hay que hacer con un negocio al empezar: crear tu web, crearte cuentas en redes sociales, empezar a captar leads, tener un calendario editorial para redes sociales, emails, escribir muchos post, dar mucho valor….
Todo esto agota, te llegan miles de estrategias que funcionan, si, no lo dudo. Pero quizás en otra fase del negocio que no es el tuyo. No puedes deslumbrarte por cada objeto que brilla.
Centraría todo en 4 ideas fundamentales:
1- Tu foco debe estar en generar ingresos al menor coste posible, cuanto antes y tomando acción desde primera hora. Aunque lo hagas de forma imperfecta al principio.
Ya irás reinvirtiendo ese dinero en todo lo que mencionado anteriormente.
2- Reunir piezas del mismo puzzle. Al final acabamos juntando piezas de distintos puzzles (cada puzzle es un tipo de estrategia) por lo que nunca terminamos ninguno.
Tenemos que buscar una solución completa que nos permita generar esos ingresos y resultados. Pero que sean piezas del mismo tablero.
3- La mentalidad es muy importante. Leer es fundamental para este cambio de mentalidad. A medida que nuestra mente se expande todo lo demás lo hace. Esto implica que al final cuando tienes buenos resultados todo es consecuencia de ese desarrollo personal que haces gracias a la lectura y otros hábitos.
4- Tú solo no puedes. Tener un mentor que te guíe y te ayude a crecer mucho más rápido con su experiencia es fundamental.
Además de, en la medida de lo posible, ir invirtiendo en un equipo que te ayude a crecer, tanto a nivel personal como de negocio.

Ernesto Ortiz, @ernestoortiz_copy

Cuando empecé a crear mi propio negocio de copywriting en internet me hubiera gustado saber muchas cosas que ahora sé y entonces desconocía…
Sin embargo, me alegro de haber iniciado esta andadura online hace ya 5 años. Porque ha sido durante el camino cuando he podido aprender de verdad sobre marketing, ventas, infoproductos, relaciones profesionales, networking, embudos, publicidad, blogging, etc (¡y lo que queda!).
Si miro hacia atrás, me doy cuenta de que en mis inicios no disponía de la mentalidad adecuada para vender. Me explico. Todos sabemos que sin ventas no hay negocio. Pero hace años yo tenía una relación difícil con ellas. Al pensar en vender, me ponía nervioso. Sudaba. Hasta que comprendí que la venta es un proceso de ayuda, que significa servir a los demás y acompañarlos a tomar la decisión acertada para poder mejorar sus vidas.
Esta mentalidad ha cambiado por completo mi forma de ver el negocio. Ahora me encanta vender, porque sé que ayudo de verdad a mejorar la vida de mis clientes. Así que si hubiese trabajado primero mis creencias sobre las ventas, estoy convencido de que habría acortado mucho tiempo a la hora de consolidar el negocio.
Cuando pones el centro en tus clientes y te olvidas de ti, la venta es un proceso totalmente natural. Vendes con seguridad, sin miedos. Y una vez consigues nuevos clientes, lo más importante es centrar todo tu esfuerzo en aportarles la máxima transformación. Porque así consigues ayudar de verdad a otras personas con tus servicios y productos.
Además, empiezas a tener “casos de éxito” y testimonios de clientes satisfechos que te recomiendan a los cuatro vientos. Y esta rueda es imparable.
Así que trabajar la mentalidad de venta es algo muy necesario para arrancar un negocio y poder crecer. De hecho, es algo que enseño a mis clientes cada vez que tengo la ocasión, porque en el sector del desarrollo personal, el coaching y las terapias, todavía existen muchas creencias limitantes con respecto a las ventas.
Creo que aprender a vender sin miedos ni límites marca la diferencia.

Borja Girón, @borjagiron

¿Qué me hubiera gustado saber cuando empecé?
Básicamente puedo resumirlo en una frase: el camino es largo pero se puede y merece la pena. La clave está en saber cuánto quieres ayudar. Cuánto más ayudes más ganas y esto requiere implicarse al máximo con esas personas.
Si algo empiezas a ver que es rentable no pierdas el foco y replícalo en otros nichos para escalar y diversificar fuentes de ingresos. Si hay algo claro es que todo cambia y nada ni nadie está a salvo de una caída de 100 a 0. Prevenir, tener copias de seguridad y diversificar es importante.
Google es impredecible. Un pequeño cambio en un texto puede hacer subir o bajar en los resultados y pasar de 1.000 visitas al día a 10.000. Registrar todos los cambios para poder volver atrás en cualquier momento es fundamental.
Parece mentira pero en muchas ocasiones tengo que decidir entre no tocar nada porque Google prefiere que no lo cambie o arriesgar, mejorar, y actualizar para ofrecer lo que los usuarios quieren y necesitan. Google no es perfecto y le falta mucho para serlo. Estas mejoras pueden implicar la ruina para ese nicho. En informática hay un dicho “sí algo funciona no lo toques”. Adelantarse a esas mejoras que va sacando Google y trabajar la usabilidad y experiencia de usuario está bien pero esas mejoras de Google es posible que nunca lleguen. Hay que aprender a mantener ese equilibrio de decisión y crear replicas o proyectos donde jugar con eso sabiendo que el proyecto base es el rentable.
En cuanto a redes sociales olvídate del número de seguidores, engagement y otras métricas similares y céntrate en crear una experiencia única de forma personalizada. Lo que mejor me funciona es el vídeo uno a uno en privado. Así es como se crean relaciones profesionales de verdad y se trabaja la confianza, haciendo que esas personas puedan ser fieles a tus productos y servicios. Además este trabajo más manual nadie lo hace ni es capaz de ser constante con él lo cual es una ventaja. Solo por seguir haciéndolo ya se pueden alcanzar resultados increíbles. Preocúpate por qué estás haciendo ahora con tus seguidores actuales.
Los embudos de venta son cada vez más difíciles de optimizar para que funcionen y depende mucho del nicho y del público. Para gente menos técnica suelen funcionar muy bien pero en otros sectores más de marketing y ventas es más complicado. La venta directa funciona muy bien si se pone el foco en ese producto y lo expones de forma estratégica en todos los sitios posibles a la vez.
Localizar esas tareas importantes que afectan en el largo plazo es clave. Crea artículos y dalos a conocer, crea podcasts y añade llamadas a la acción generando curiosidad y avisando de novedades, sube vídeos a YouTube, crea productos y estate atento a lo que pide y necesita la gente. Un cambio pequeño en el copy y en los precios mediante la técnica del bueno, el feo y el malo puede marcar un incremento de ventas exponencial con el mismo producto. Además lo importante es el valor percibido y si es barato o caro no afecta tanto al número de ventas. Esta es una creencia limitante que hay que evitar. Eso sí, es difícil encontrar ese texto adecuado que haga que todo funcione.

Silvia Llorens, @calmafinanciera

Tardé mucho en REALMENTE empezar con mi negocio online de coaching en Finanzas Personales. Es cierto que tuve que formarme en muchos aspectos del mundo del marketing digital y eso lleva tiempo y romper muchas creencias limitantes, como la edad. Empezar con 48 después de 25 años de experiencia en otro mundo que no tiene nada que ver con lo nuevo que estás creando hizo que me resultara costoso arrancar.
Así que habría agradecido mucho el haber tenido la oportunidad de formarme en herramientas digitales antes de comenzar, que luego ves que son muy útiles y sencillas de utilizar pero que al principio les tienes tanto respeto que no te atreves a lanzarte. Email marketing, crear tu propia web, hacer encuestas online, tus propios vídeos, grabarlos y editarlos… son muchas cosas, que son sencillas pero todas juntas de golpe te abruman.
Por otro lado, somos como hombres orquesta y son muchas, muchísimas cosas las que debes ir haciendo a la vez. Gracias a mi formación anterior como Organizadora Profesional, tenía las herramientas para poner en marcha sistemas y estar más organizada, aún así cuesta, o sea que quien no sea por naturaleza organizado, aquí hay que hacer un gran esfuerzo.
Otra de las cosas que me habría gustado saber al comienzo es cuales son los aspectos en que realmente es importante invertir y cuales son más superfluos o menos prioritarios que se pueden dejar para más adelante. Empezar conlleva gasto e inversión y todo el mundo te da su opinión y te animan a que inviertas en esta herramienta o en este curso o en esto y lo otro… Al final el coste es enorme y con el tiempo te das cuenta que había cosas en que gastaste que podrías haber esperado a más adelante cuando facturaras de una manera más estable.
Por último, habría agradecido muchísimo cuando empecé que me hubieran inculcado en el pasado la mentalidad emprendedora. No hemos sido educados para emprender, nos han metido miedo y nos han enseñado que el fracaso no es bueno y que hay que evitarlo a toda costa. A mí me inculcaron tener un trabajo estable o hacer una oposición y ser funcionaria … Nadie me enseñó que si tenía sueño debía perseguirlo aunque fracasara. Si de pequeños nos hubieran inculcado que el fracaso es lo que te mueve a ir hacia delante, que necesitas fracasar muchas veces para llegar al éxito, habría empezado mucho antes y habría sido más atrevida. Habría tomado acción con mucha más energía.

Geni Ramos, @geniramos

El gran error que cometí yo al empezar mi emprendimiento digital en 2015, es que pensaba que para «ganarme bien la vida» tenía que tomar un camino con complicaciones, sudor y muchas horas de esfuerzo. Siempre me habían vendido que para ganar bien, había que trabajar mucho. De hecho esos fueron mis primeros 2 años de negocio, hasta que me di cuenta, que no hay que trabajar más, hay que trabajar de forma inteligente (esta frase es de mi amigo Cris Urzua). Este maravilloso mundo digital pone a tu disposición herramientas que te hacen la vida más fácil. Con las que puedes ganar más con menos, rompiendo con los estándares habituales del trabajo. Emprender en digital es fácil. No tienes que complicarte la vida. Con un buen ordenador y conexión a internet te trasladas a una realidad paralela. Puedes teletrabajar desde cualquier parte del mundo. Organizar las horas de trabajo según tus necesidades u objetivos. Y lo que a mí más me gusta del mundo digital, es que obviamente necesitas una inversión inicial. Pero no tiene nada que ver con los negocios tradicionales. Montar una página web para vender tus productos online puede costarte menos de 30€/mes. En ningún sitio encontrarás un alquiler de un local por ese precio. Esa es la magia del digital. Después de 5 años con mi negocio online, ahora puedo decir que soy dueña de mi tiempo y tengo total libertad para hacer lo que quiera en cada momento del día. Y eso, no tiene precio y tampoco es difícil de construir. Simplemente tienes que permitir abrir tu mente a una nueva manera de trabajar y como dicen los ingleses «think out of the box», piensa fuera de la caja para descubrir nuevas posibilidades y aprender una nueva manera de trabajar: más eficiente e inteligente.

Antonio G, @inteligenciaviajera

Que la forma más rápida para facturar los primeros 1.000€ es conseguir un solo cliente que te pague ese importe. Que para pasar de 1.000€ a 10.000€/mes lo más rápido es pasar 10 clientes 1 a 1 a un grupo de mastermind con pago periódico. Y que para hacer más de un millón solo necesitas hacer cálculos matemáticos que se reducen a precio de tu producto, objetivo facturación, CRate, leads que necesitas y CPL. Ahí te sale cuánto tienes que invertir en publicidad + combinando con un buen producto, listo!

Sebastián Lora, @seb.lora

Me habría encantado que me dijeran desde el principio: haz vídeos alrededor de una estrategia de negocio.
En julio del año 2016 me lancé 100% a mi proyecto emprendedor como formador en habilidades de comunicación.
Justo tres años antes, en verano de 2013 Eva, mi mujer, una chica con visión, me dijo: “Tienes que hacer vídeos”.
Estaba muy bien encaminado hacia encontrar mi elemento, mi ikigai, y llevaba ya varios años aprendiendo sobre oratoria y habilidades para hablar en público; el paso siguiente era comenzar a dar cursos con la idea de llegar a vivir de ello.
Mi reacción inmediata fue: “Sí amor, claro.”
Pero por dentro decía: “Tú qué sabrás. Si el experto aquí soy yo.” Por supuesto, lo pensé pero no se lo dije porque me habría mandado a la m13rd@.
Yo llevo con Eva casi 10 años y desde el inicio de nuestra relación me topé con dos grandes verdades sobre ella con las que he tenido que aprender a vivir muy a mi pesar:
Siempre tiene la razón.
Es una persona muy insistente.
Es por eso que la idea de los vídeos siguió dándole vueltas en la cabeza y por nuestro aniversario me regaló una sesión de estudio con un amigo para grabar mis primeros vídeos para YouTube.
Terco que soy, acepté el regalo un poco a regañadientes, pero decidí sacarle partido y durante todo un domingo grabamos 14 vídeos cortos que fueron el inicio de mi carrera con el vídeo online. Pero tengo que reconocer que al principio me lo tomé de manera muy informal.
No fue hasta pasados dos años que, siguiendo las indicaciones de Víctor, quien fue mi mentor por aquella época, decidí dar el paso para buscar asesoramiento con alguien conocedor de YouTube y la creación de vídeos.
Ése fue el punto de inflexión. Gracias a él, conseguí darle una vuelta a lo que hasta el momento era un “canal fantasma”. Hoy mi canal tiene más de 380k subs, más de 15 millones de visualizaciones y es mi mayor herramienta de marketing. Me ha permitido posicionarme como referente en mi área, diferenciarme de la competencia y cobrar tarifas más de cuatro veces superiores a la media en mi nicho.
Hacer vídeos cambió mi vida y el rumbo de mi carrera, pero también me ha permitido ayudar a otros a que cambien las suyas.
Me considero afortunado por estar donde estoy y hacer lo que hago, Pero reconozco que si hubiese comenzado en serio con el vídeo cuando me lo recomendó mi mujer, mi negocio estaría en un nivel muy superior.

Tatiana Torres, @tatiana.imm7

Que no era necesario pasar horas y horas frente a la computadora tratando de hacer el artículo perfecto, el webinar perfecto, la gráfica perfecta, la foto o video perfecto. Que es mejor no tener estrés y usar la tranquilidad para tener más creatividad y crear algo que sea útil y ayude realmente a los demás. Teniendo un negocio que sea justo tanto para mí como para los demás. Por ejemplo al día de hoy mi negocio solo consiste en llevar anuncios y luego tener conversaciones en Whatsapp eso es todo lo que hago para obtener ventas todos los días.

Tomás Escobar, @tomasgescobar

Cuando empecé me hubiese gustado tener cerca de mí a gente que ya hubiesen pasado por lo que yo iba a pasar, para en el momento que lo necesitase pudiese pedir un consejo o poder consultar qué tal lo estaba haciendo.
Una guía que me diese ese aliento y foco que a veces se necesita, aunque no que me marcase todo lo que tengo que hacer, creo que la figura del guía o del mentor es muy importante, pero este debe saber encontrar el equilibrio entre marcar el camino y permitir al mentorizado que se equivoque un pelín, no hay experiencia como la que uno mismo aprende.
Muchas veces no se necesita el consejo como tal sino una simple reafirmación de que no estás loco, de que lo que tú estas pensando e intentando tiene sentido y merece la pena. Solo el quitarte del medio el ruido que no hace nada más que molestar y poner una melodía de apoyo hace muchísimo.
Me hubiese gustado saber que hay otras alternativas reales en el mundo, que hay miles de caminos y al final cada uno es libre de escoger y disfrutar aquel que selecciona para vivir, no solo para vivir el emprendimiento, sino para vivir en general.
Me hubiese gustado tener un punto más de atrevimiento, y uno menos de post arrepentimiento.
Me hubiese gustado que mis gafas de cerca funcionasen mejor para así poder ver lo mucho que ya tenía en cada momento, y no obsesionarme con lo que está por llegar.
Como dice un poema que se atribuye a Gabriel García Márquez en su carta de despedida al ser diagnosticado de cáncer terminal “A un niño le daría alas, pero le dejaría que él solo aprendiese a volar”
Pues a mí hubiese gustado que me diesen esas alas del emprendimiento, pero que me permitiesen que yo aprendiera a manejarlas, puesto que equivocarse en cierta medida es la esencia la vida, e incluso de la felicidad.
Y como siempre me gusta decir, que no se os olvide vivir.

Laura Sánchez, @yosoylaurasanchez

Sin lugar a dudas me hubiera gustado saber que esto de emprender es una auténtica MONTAÑA RUSA de emociones y sentimientos.
Habrá días en los que sientas que eres lo peor y vendrán todos los síndromes del emprendedor, el del impostor, el objeto brillante, los miedos, bloqueos y creencias limitantes… y muchas veces desearás tirar la toalla y abandonar. Sin embargo, otros días te vendrás arriba y te sentirás una auténtica HEROÍNA y una auténtica crack.
¡Toda una montaña rusa de emociones!
Me hubiera gustado saber que la base de toooodo negocio está en la MARCA. La marca eres tú, tú eres el núcleo, el centro de tu negocio y tienes que estar bien para poder ayudar a otras personas.
Desarrollar mi propia marca personal de forma estratégica supuso un antes y un después para posicionarme como la mejor opción para mis clientes.
Me transformé y dejé de ser una diseñadora gráfica del montón donde solo hacía diseños para todo el mundo.
Ahora no sólo diseño la imagen visual de marca a mujeres emprendedoras sino que las acompaño y guío a desarrollar estratégicamente su marca personal para que se empoderen, sean líderes de su sector y puedan vivar de sus sueños.
Si observas todos los proyectos molones que sigues, a todas las personas que han triunfado, que tienen éxito o que les va bien, llámalo como quieras, todas estas personas tienen una gran marca desarrollada.
La marca personal es el resultado de una gestión consciente y estratégica de la percepción que tienen los demás de nosotros como profesionales.
Y a día de hoy trabajar la marca personal ya no es una opción, le interesa a todas las personas sea cual sea su categoría profesional, trabaje por cuenta ajena o propia.
Me hubiera gustado saber que debes DESAPEGARTE DEL RESULTADO, que una persona no es ni mas, ni menos, por los resultados que tenga.
No te obsesiones con el resultado y ten presente que tu autoestima tiene que ser independiente de tus resultados.
Tú eres una persona única y especial, ya eres un crack consigas los resultados que consigas.
Solo piensa, quien eres, dónde quieres estar, que es lo que quieres hacer con tu vida y en base a eso elegir cada proyecto, cada afiliación, cada alianza, cada planificación.
Construye y desarrolla tu propia marca personal, trabaja desde tu esencia, define tu filosofía y tu diferenciación de marca, piensa con quien te quieres relacionar, que valores compartes…
La marca es COMUNIDAD, sin ella no vamos a ningún sitio.
La marca son EXPERIENCIAS, disfruta y emprende con alegría.
Pero no tienes que compararte con los demás. Busca ser cada día más y mejor, no busques resultados rápidos y haz cada día algo, pasito a pasito.
Y recuerda, no hay marcas grandes ni pequeñas, lo que hay es la trayectoria de la marca. Unas llevan más tiempo que otras. Pero todas comenzaron desde 0 patatero.
Y por último y más importante, emprende con alegría, haz las cosas desde el CORAZÓN, y no desde la necesidad de vender.
Cuando tratas de vender para ganar dinero, la cosa no va bien, no te compran, te frustras y estás buscando resultados rápidos. Así nunca podrás ayudar.
Cuando te desapegas del resultado, cuando ayudas a otras personas desde el corazón y no desde la necesidad todo cambia. Todo fluye, se nota. Brillas, te muestras desde tu esencia. Empiezas a ser feliz, a dar lo mejor de ti, comienzas a transmitir tus valores, a ayudar, crecer, creer en ti, crear comunidad, jugar, divertirte y disfrutar de cada momento. Y es ahí cuando emprender se convierte en una gran experiencia.

Marina de Luna, @marina.de.luna

Cuando comencé mi emprendimiento me hubiese gustado saber que todos los planes y requisitos que creía tan necesarios antes de dar el pistoletazo de salida, no eran tan imprescindibles como pensaba. Mi emprendimiento ha evolucionado conmigo a lo largo de todo este tiempo, y lo sigue haciendo. Mi marca personal responde a quién soy yo, cambia y crece cada día.
Si ahora pienso en el negocio que planeé en un principio y cómo finalmente ha evolucionado, me doy cuenta de la cantidad de energía que empleé en planificar situaciones que nunca se llegaron a dar.
Hoy he aprendido que el emprendimiento y la reinvención profesional no son algo que inicias una vez en tu vida, sino un viaje continuo de desarrollo personal y profesional.
He aprendido a no casarme con mis ideas, ni con mis servicios, ni con mis proyectos. Ya no me caso ni con mis opiniones, y ese pensamiento crítico, el estar en constante revisión, el siempre tratar de responder con lo que hago a lo que me pide la mente y el corazón es lo que me hace feliz y me permite estar satisfecha con mi trabajo cada día.
Sin embargo, esta moneda tiene dos caras. Por el otro lado está la de saber aplacar a tu ego. Recuerdo que cuando empecé ponía demasiada energía en comunicar para demostrar. Hablaba de los temas que me parecían más interesantes, más intelectuales o que me daban más autoridad, pero no llegaba a aterrizar lo que realmente necesitaba mi potencial cliente.
Así llegué a tener una lista de lectores muy fieles, pero que jamás me comprarían. Les encantaba leerme, pero nunca considerarían que necesitaban ningún servicio por mi parte. Ese fue un gran error del que sin duda alguna hablaría con la Marina de entonces.
Sin embargo, he de decir, que creo que aunque fuese capaz de hablar con mi yo del pasado acerca de todo esto, no cambiaría ni un ápice lo que he hecho. En primer lugar porque hay errores que para aprender necesitas cometer tú misma y por otro lado, porque todo este recorrido es lo que me ha traído a donde estoy ahora 🙂 ¡Y eso no lo cambio por nada!

Roser Albareda Albà, @sitges_pranic

Ojalá hubiese pensado 33 años atrás, que sería de vital importancia para todos los negocios, y digo todos, las ventas online.
Un control adecuado de un planing semanal, mensual, trimestral, con sus potentes herramientas de marketing.
Poner planificación y foco en tu empresa y vida, las dos van cogidas de las manos.
Planificación, foco y ventas para lograr alcanzar tu sueño, no, no hablo solamente con la mente sino con el corazón, llegar de esta forma online a ayudar a miles de personas, enseñarles a gestionar las emociones y aprendizajes en su vida y su empresa.
“Todo somos uno, persona y empresa”. “Persona con corazón es igual a empresa con una bella Alma”.
Conocer el gran cambio que ha supuesto en el mundo esa vida y experiencia detrás de un ordenador, que es una forma actualmente aún de llegar a todas las personas y sabes… que nunca es tarde, no hay excusas de edad, formación, tiempo y lo digo por propia experiencia, ya soy madurita. 😊
Para nuestro éxito es importante poner cambios en la vida, acción y poner resolución a cualquier circunstancia laboral o personal para conseguir tu objetivo o sueño que siempre has soñado poder lograr.
Planificar, foco, acción, compromiso, excelencia y sobre todo amor y aceptación a todo lo que hagas y todo lo que haya sucedido o suceda en tu vida.
Tienes que recordar que eres la persona que eres, con tus cualidades, éxitos, fortalezas y debilidades por todo lo que te ha ocurrido y has vivido en tu vida, con lo cual todo ha sido necesario y correcto para encontrarte en el punto de tu vida en que te encuentras…o me encuentro.
Si hubiese sabido todo esto 33 años atrás, me hubiera ahorrado muchos batacazos…pero todo fue necesario, al igual que planificar tu día a día y tomar acción /resolución.

Marcos de Emowe, @emoweaprendizaje

La respuesta es un poco egoísta porque ya no sólo es para compartirla con vosotros, sino sobre todo para que algún día la puedan escuchar mis hijos.
Me hubiera gustado saber que debo evitar convertirme en una commoditie o en un servicio, algo fácilmente subcontratable y que se puede automatizar.
Esto es válido, tanto si trabajas por cuenta ajena o propia, todo el mundo, otras empresas, tus clientes, tus jefes si estás por cuenta ajena…. todos, todos van a tratar de empaquetarte en un servicio, como si fueras luz o el agua que se consume al antojo de otros. Incluso te intentarán convencer de que lo eres.
¿Por qué? Porque es más barato, porque es más fácil gestionar un servicio dado que tienen demanda, porque es más sencillo escalarlo.
Incluso, cuando no seas un servicio, van a tratar de empaquetarte como tal si te dejas.
Por tanto, mi consejo es siempre evitar ser un servicio y, en vez de esto, centrarte en ser el mejor en una cosa concreta. Sé único en eso, crea una marca personal o de empresa que esté especializada en algo muy concreto. Es importante que el valor que aportas sea único e intransferible pero también tú sepas comunicarlo adecuadamente y hacerlo visible.
Me gusta decir que las marcas personales o de empresa siempre deben cumplir los tres vértices del triángulo del éxito: contenido de alto valor y único para evitar que te empaqueten como servicio, visibilidad para dar a conocer tu trabajo fuera y comunicación para saber esquivar los intentos de otros para empaquetarte como servicio.
Pero, ¿qué ocurre si quieres ser el mejor en algo concreto? Que no tiene un retorno económico, ni de reconocimiento a corto, medio plazo y esto hace que se sucumba a los servicios de corto alcance para empezar a tener ingresos. No todo el mundo está dispuesto a cruzar la travesía del desierto de la maestría en algo único. Para ser único tendrás que hacer muchas, muchas pruebas y cometer muchos, muchos errores…. hasta que poco a poco, adquieres una habilidad única que luego todo el mundo envidia pero nadie estaba dispuesto a pagar ese precio.
Pero, puestos a jugar en esta vida, ¿qué prefieres ser?
Alguien que hace lo mismo todos los días de su vida o alguien haciendo algo distinto para seguir aprendiendo en su habilidad única y así jamás te alcanzará la competencia.

Ana Nieto, @ananietochurruca

Fundamentalmente dos cosas. Haberme formado desde el principio. Perdí mucho tiempo y esfuerzo en buscar por mi cuenta información disponible en Google o en YouTube. Ahora buscaría buenos programas o mentores para avanzar más rápido y sobre todo «no dar palos de ciego». Y por otro lado, no me preocuparía tanto del «dinero» sino en conocer bien las necesidades de mis clientes. Yo pensaba que conocía bien a mis clientes, pero hacer encuestas y preguntarles me abrió los ojos e hizo que creara un nuevo programa que es el de más éxito de los que ofrecemos ahora.

Javi Pastor, @jpastorre

Me hubiera gustado saber 3 cosas:
1. Lo difícil que es conciliar, cuando llegas a cierto nivel, la vida personal y profesional y lo importante que es proteger la primera.
Este tipo de negocios se convierten en un hobby peligroso porque dejas de distinguir la frontera entre trabajo y ocio. Yo lo he aprendido por las malas con latigazos cervicales, amigos perdidos, visitas al neurólogo y “un poquito” de estrés.
Tiene mil cosas buenas, pero hay que saber controlar esta parte y saber que a veces es más importante contratar un buen coach o psicólogo que mejorar a nivel de marketing. Lo primero siempre tienes que ser tú.
2. La importancia de ser constante por encima de buscar la perfección o intentar hacer de todo. Soy una persona que no tiene la constancia como una de sus virtudes y he dejado a medias decenas de proyectos e ideas por este motivo. Lo triste es que mis mejores proyectos, resultados y todo vienen de iniciativas en las que SÍ he mantenido la constancia.
Es una tontería, pero para mí el repetir una y otra vez haciendo lo mismo, creyendo, manteniendo todo a largo plazo, es lo que marca la diferencia.
No importa si hablamos de un blog, un podcast, un programa, una acción de ventas, emails a puerta fría, eventos o lo que quieras… simplemente es mantenerse, repetir y seguir mejorando.
3. Lo vital que es encontrar un grupo de amigos del sector con los que relacionarte y apoyarte. No hablo de afiliación ni de colaboraciones comerciales, sino de apoyo emocional y de tener un círculo con el que hablar en “tu idioma”.
Yo siempre tuve un pequeño círculo desde que comencé, pero ahora me siento más arropado que nunca ante cualquier problema porque sé que tengo muchos amigos a mi alrededor que me aconsejan, me ayudan y me apoyan. Eso no tiene precio y es algo que hay que buscar desde el día uno.

Isa y Juanmi, @MasyMejorEmprender

Millones de gracias a todos los participantes en este super artículo que hemos preparado con tanto cariño 🙂
Ahora antes de cerrar queremos contarte nuestra opinión.
¿Qué nos hubiera gustado saber a nosotros cuando empezamos?

Vamos a resumirte en 2 puntos:
1 Rodéate de las personas correctas
Recuerda: “Eres la media de las 5 personas con las que más tiempo pasas”
Si te rodeas de personas que te motivan, que te inspiran y que te ayudan a mejorar, tu éxito es inevitable.
Es importante tener mentores, formar parte de grupos de mastermind
y comunidades online fuertes (date un paseo por el directorio de emprendedores), con personas expertas en las que puedas confiar.

2 Invierte en ti Mismo y en tu Equipo
Durante mucho tiempo lo hacíamos todo nosotros.
Nos costaba delegar y lo veíamos más como un gasto.
Pero después nos dimos cuenta de que invertir en crear un equipo de personas que te ayuden, te da más velocidad y te permite centrarte en lo que mejor sabes hacer y en tareas estratégicas de tu negocio.
Y también te da más calidad de vida porque ya no tienes que trabajar tantas horas! Ahora bien, gestionar un equipo es todo un reto y para eso necesitas que tu negocio esté bien organizado.

Así que no te olvides de apuntarte a la Semana de la Productividad.
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¡Estamos deseando verte en acción!